Adviento: la pregunta desconocida
El año litúrgico empieza con el tiempo de Adviento. Cada tiempo litúrgico conecta, por lo menos, con una dimensión antropológica y la transfigura en una actitud teologal. El Adviento se enraíza en la esperanza, que el diccionario define como “Estado de ánimo que surge cuando se presenta como alcanzable lo que se desea.”. No obstante, a veces la esperanza se confunde con optimismo o expectativa. Tienen alguna cosa en común pero son diferentes. La expectativa es más bien autorreferencial. Implica una proyección de los propios deseos.